Calle 13 - Latinoamérica

El diario de mis sueños, N°3

El diario de mis sueños 23/6/13

Me encontraba en una plaza muy grande, con una amplia planicie, en donde podía divisar a decenas de metros algunos árboles con la canopia verde y edificios a la lejanía. Todo el sitio estaba coloreado con un tono azulado. De pronto comienzo a despertar en mi sueño a ganar lucidez.En ese instante dudo si es un sueño o no, porque parecía todo muy real, solo me mantenía de pie mirando el paisaje azul. Realizo la prueba del tapado de nariz para ver si realmente estoy en un sueño o no. Esta técnica consiste en taparse la nariz con la mano, apretando los orificios de la nariz impidiendo que pase el aire para poder respirar, en la realidad uno si intenta respirar con la nariz tapada es obviamente imposible respirar, pero por el contrario si uno realiza el tapado de nariz en un sueño, uno efectivamente puede respirar, experimentando una briza cálida que pasa como si fuese aire.Al realizar el tapado pude comprobar que se trataba de un sueño, ahora mi sueño se había transformado en un sueño lúcido, sin esperar ningún segundo más doy un gran salto, llegando a los diez metros de altura, quedo suspendido en el cielo del sueño y comienzo a caer lentamente, intento volar pero me era imposible, así que me imagino una alas como ángel y de mi cuerpo se desprenden dos grandes alas invisibles que las podía sentir, cada ala era más menos mi altura. comienzo moverlas y empiezo a volar por breve instante, fue muy gratificante la experiencia, una vez en el suelo me encuentro con mucha gente, alguna no me hablaba, pero otros me felicitaban por el gran logro que había obtenido, todos estaban muy contentos.

El diario de mis sueños, N°2

El diario de mis sueños 15/4/10

Tomo una siesta en el sillón de mi casa, me duermo, luego me "despierto", veo mi mano transparente, distorsionada, me doy cuenta que es una proyección astral, me levanto de mi puesto abro el ventanal de mi casa y me dirijo a la casa de mi vecino, viendo algo muy extraño, en el patio había una estatua de conejo muy grande de unos dos metros de altura, me devuelvo a mi hogar. En mi patio y casa deambulaban muchos familiares, primos, tíos, etc. al entrar por el ventanal a mi morada me llevo la mayor sorpresa de la experiencia, me veo a mi mismo al frente de mi, llevaba una polera azul de Australia. quedé muy asustado por el repentino aparecimiento detrás del ventanal, fue una clara broma de parte de él de querer asustarme, pero llevaba una cara muy cálida, amigable y sonriente. Así que no fue mal intencionada su acción,
luego todavía tembloroso subí las escaleras y vi a mi padre en el segundo piso haciendo ejercicios, traspaso la ventana y quedo sentado en lo más alto del techo contemplando el atardecer por un buen tiempo, solo veía el sol que estaba en un oscuro y negro cielo, pierdo la conciencia y vuelvo a mi cuerpo.