lunes, 16 de diciembre de 2013

El diario de mis sueños, Nº9

El diario de mis sueños 16/12/2013 Hoy experimenté un sueño que se está haciendo constante en mi, no se si porque estoy logrando controlar mis desdoblamientos, o solo porque se está haciendo reiterativo. esta experiencia no la escribiré con tanto detalle ya que ha pasado un día entero desde que ocurrió. despertaba en una habitación, me volteo y habían dos camas, era la casa de Santiago, en ese momento me encontraba físicamente en la pensión de Valparaiso. con mucha dificultad hago la prueba de realidad con el tapado de nariz y me doy cuenta que es un sueño lúcido, no se si fue un verdadero desdoblamiento, pero todo era exageradamente real. me encuentro con mi padre y me pregunta que me pasaba, intento decirle que estaba desdoblado pero no me sale la voz, la segunda vez que intento comunicarme con él, grito y efectivamente me sale la voz algo forzada "estoy desdoblado" por alguna razón creí que estaba físicamente en ese lugar, solo que con una visión astral, así que intenté saltar pero me era muy complicado. ahora viene lo reiterativo, nuevamente despierto en otra cama, esta vez no recuerdo bien, pero era la misma casa que se iba transformando con el tiempo. me levanto y siento un frío en mis piernas, no se si estaba desnudo o no, pero lo que si estaba seguro que en mi boca sentía una distorsión algo extraña, ignoré esa sensación. después me despierto nuevamente y comienzo a sacar conclusiones. no se si cada vez que despertaba me iba a otras dimensiones astrales o solo despertaba una y otra vez en el mismo lugar. Después de despertar me levanto de la misma cama, todo estaba oscuro, pero se lograba divisar todos los objetos de la casa, siento la misma sensación extraña en la boca, así que voy al baño, por alguna razón sabía donde estaba el baño, pero no recuerdo distinguir bien la casa, no se si era mi casa de santiago, la pensión, o una fusión de estas. Al entrar al baño abro la llave y comienzo a remojar con el agua del lavamanos mi boca que la sentía algo extraña, al igual que otras experiencias los dientes son muy fáciles de arrancar y se reponen también muy fácilmente. Esta no fue la excepción, al entrar con contacto del agua sentía como todos mis dientes se caían al lavamanos y también sentía como el agua fría se llevaba la sangre de mi boca y el malestar o distorsión de mi boca nunca se calmó, este malestar no era doloroso sino que extraño